Los presos de EE. UU. podrán capacitarse para convertirse en camioneros: una segunda oportunidad al volante de un camión

Reclusos del sistema penitenciario de Ohio, en Estados Unidos, tendrán la oportunidad de mejorar sus vidas cuando cumplan sus condenas, convirtiéndose en camioneros. La iniciativa fue creada por el Departamento de Rehabilitación y Corrección de Ohio para alentar a los reclusos con sentencias leves y medias a comenzar una carrera en el sector del transporte.

Como parte del proyecto, estos presos tomarán 40 horas de clases teóricas y luego realizarán un examen. Si son homologados en esta primera prueba, realizarán una formación completa con camiones, también con clases teóricas, además de nociones de mantenimiento y conducción.

Luego de terminar el curso, podrán obtener una Licencia de Conducir Comercial (CDL), lo que les permitirá trabajar en cualquier empresa de transporte en los Estados Unidos. Aún con el curso finalizado, los detenidos sólo podrán salir de la cárcel después de cumplir la totalidad de sus penas.

Cuando pueden trabajar, todavía necesitan pasar tres semanas más de viaje con un conductor instructor dentro de la cabina, para garantizar la seguridad del viaje.

Para el Estado, facilitar que los detenidos obtengan la licencia de conducir ayuda mucho en su resocialización y, en la mayoría de los casos, evita que regresen al mundo de la delincuencia.

Como se hace en sociedad con empresas, el costo para el gobierno es bajo. En el mercado común, la licencia de conducir profesional norteamericana puede costar más de US$ 5 mil.

Además de Ohio, otros estados también tienen programas similares, como Mississippi y Florida. El programa es bueno para los reclusos, así como para los transportistas estadounidenses, que están desesperados por contratar conductores.