Debido a la escasez, el salario mínimo para los conductores polacos ha aumentado en más de un 6% anual en dos años.
El 1 de enero de 2019, ascendía a 2.250 PLN, o 523 € brutos mensuales. A este salario se suma una parte variable, en adelante calculada en función del número de días de estancia en el extranjero, con viajes diarios diferenciados según los países visitados y no más por kilómetros, de acuerdo con la normativa europea.
Para retener a su personal, los transportistas no dudan en conceder la asignación diaria máxima (entre 38 € y 57 € por día). En total, el coste de un conductor contratado polaco creció un 7,4% anual en promedio entre 2017 y 2019 hasta situarse en 23.575 € / año el año pasado.