Por estas y otras razones abandoné la profesión de conductor y no tengo intención de regresar.

Estoy de acuerdo con todo lo que se dijo en este artículo. Yo mismo abandoné la profesión de conductor de autobús en América del Sur después de 20 años debido al bajo salario, la precariedad del alojamiento, muchas exigencias, la policía al acecho, el pasajero, el jefe, la empresa, el radar, la carretera cada vez más concurrida,
etc...   Las empresas dan por sentado, turnos mixtos donde viajas día y noche durante largas horas, y el
cuerpo no puede soportarlo, jornadas de trabajo excesivas y poco tiempo de descanso, especialmente
en vacaciones y fin de año.

Viajes estresantes, guardando y entregando bolsas de viaje, sirviendo bocadillos, dando
discursos, cumpliendo con el horario, se da cuenta de que le han arrojado tantas cosas a la espalda al
pobre conductor que es difícil soportarlo.

Es muy estresante. El pasajero molesta todo el viaje, ¿hay película? No quiero esta película. Esta frio. Es demasiado caliente. ¿Puedo bajar a fumar? ¿A qué hora paras a merendar? ¿A que hora llega? ¿Puedes abrir el maletero para poder coger mi cargador, blusa, etc...    Me pagaron, aunque tenía razón, perdí mi maleta pagada, me pusieron doble multa, entonces es mucha molestia, mucha de exigencias, mucho estrés y mucha responsabilidad para poco beneficio y dormir todo el día en un lugar diferente, mal colchón, sin almohada, sin manta, alojamiento sucio, muchos conductores en el mismo camarote. Autobuses en mal estado averías en la carretera, retrasos en la ayuda, pasajeros que te llenan el depósito. Quejándote de todo como si fuera tu culpa.

En definitiva, no merece la pena. Usando Uber obtengo lo mismo, o incluso más, y no tengo ni la
mitad de molestias. Sabes algo que yo también odio y es trabajar con mangas largas. Las empresas
están de moda ahora: solo se puede trabajar con una camisa de vestir de manga larga. Vete a la
mierda, hombre, está muy sucio, cuesta lavarlo, plancharlo y en un lugar caluroso es una tortura.

Por estas y otras razones abandoné la profesión y no tengo intención de regresar.