La crisis asfixia las empresas de camiones polacas de transporte: 3.084 han cerrado

Después de superar con creces el desafío dictado por la pandemia y de haber soportado el impacto del estallido del conflicto en Ucrania, el transporte por carretera polaco en camiones atraviesa una grave crisis lo que está ejerciendo presión sobre la resiliencia de las empresas. Según un estudio publicado por el diario Gazeta Prawna, de hecho, 3.084 empresas ya han suspendido sus actividades, mientras que los costos operativos y las deudas continúan creciendo a un ritmo alarmante. Un caso elocuente es sin duda el de la empresa DFL Transport, con sede en Kielce. Desde marzo, la empresa no ha pagado los salarios de los conductores y empleados y se declaró en quiebra en abril. Representantes de la empresa emitieron un comunicado oficial, que también fue colgado en la entrada de la ahora desierta sede.

El texto comienza informando a los clientes que “nuestra empresa se ha declarado en concurso de acreedores debido a la difícil situación del mercado y a una serie de factores externos que han tenido un impacto negativo en nuestro negocio. Nuestra empresa está en el mercado desde hace más de diez años y emplea a más de 55 personas, incluidos unos 35 conductores. Sin embargo, las secuelas de la pandemia de Covid-19 presentaron un gran desafío para la industria del transporte y el estallido de la guerra en Ucrania significó que la mitad de nuestros conductores regresaran repentinamente al país, un momento difícil para nuestra empresa. El contrato con nuestro principal cliente nos obligaba a realizar el mantenimiento de una determinada cantidad de vehículos en funcionamiento y su paralización generaba importantes penalizaciones por parte del cliente”.

El comunicado continúa explicando que “la situación global actual, la alta inflación y el aumento significativo en los costos de funcionamiento de un negocio han contribuido a una reducción significativa en la rentabilidad de nuestras operaciones. Además, en 2022, las empresas de transporte experimentaron un importante aumento de los costes de personal debido al nuevo sistema de liquidación de nóminas. Hemos luchado hasta el final con los costos altos y con los clientes para subir las tarifas. Desafortunadamente, en un momento perdimos nuestro efectivo y nos vimos obligados a declararnos en bancarrota".

El aumento de los costes se debió principalmente a los requisitos introducidos por el Paquete de Movilidad en febrero de 2022. Un estudio realizado por Inelo Group, una empresa de información activa en el sector, en colaboración con el Instituto Polaco de Transporte por Carretera muestra que los salarios de los conductores han aumentó hasta un 40% en el último año. Dos tercios de las empresas entrevistadas consiguieron absorber el aumento renegociando al alza las cuotas de transporte, mientras que el 36% no logró obtener mejores tarifas.

El 98% de las empresas en cuestión también se quejó de un aumento en los costos operativos entre 26 y 50%. Además de los salarios, la emergencia estuvo provocada por el aumento en el costo del combustible registrado en 2022 y niveles récord de inflación, provocados a su vez por las múltiples turbulencias en la economía mundial. Uno de los más importantes, a saber, la guerra en Ucrania, también tuvo un fuerte impacto en el número de conductores, ya insuficiente antes del ataque ruso.

No obstante, el estudio, denominado Barómetro Inelo 2023, subraya que pocas empresas están considerando reducir la flota de la empresa o reducir el número de conductores, con el fin de estar preparados para una eventual recuperación del sector. Las propias empresas, sin embargo, no han descartado la posibilidad de rebajar salarios o reducir costes recortando el número de empleados administrativos. Los resultados sobre la liquidez también son alarmantes: solo el 8 % de los transportistas polacos registraron una mejora en las condiciones de pago y, por tanto, en la devolución de los créditos, mientras que tres de cada diez empresas sienten el riesgo de perder liquidez en un futuro próximo.

La investigación concluye con un análisis del abandono de algunos mercados por parte de los transportistas. Muchos transportistas también se han visto obligados a dejar de operar en Rusia, Bielorrusia y Ucrania. El informe estima una caída del transporte en estas rutas de entre un 5% y un 6% siendo interesante el caso de los servicios en Gran Bretaña. Muchos transportistas han salido del mercado tras los cambios legislativos relacionados con el Brexit, dejando efectivamente una gran cantidad de servicios sin cubrir, lo que ha llevado a un aumento de casi ocho puntos porcentuales en los volúmenes de aquellas empresas que permanecen operativas.