Tres hijos y un solo sueldo en la familia: "Tuve que buscar trabajo, me hice camionera"

Esta es la historia de una mujer ucraniana  que decidió subirse al camión obligada por la situación y el alto precio de la vida en Europa.

La mujer se abrió una tienda en enero de 2020, luego se cerró  a causa del covid y para Iryna Gobeletska, la mujer ucraniana de 34 años, la necesidad de encontrar una nueva forma: «Para poder pagar todos los gastos; la subida de precios nos ha pegado duro»

Con un solo salario en la familia, teniendo tres hijos, me vi obligada a buscar un nuevo trabajo. Así que me hice camionero, como mi marido». Iryna Gobeletska es una mujer ucraniana de 34 años que vive en Piacenza con su esposo e hijos desde hace cinco años. Representa solo una de las muchas historias de hombres y mujeres que intentan reinventarse para salir de un período económico difícil, que comenzó con Covid y resultó en los aumentos de precios y la inflación de estos últimos y agotadores meses.

Habiendo llegado a Piacenza con su familia desde el interior de Nápoles, Iryna había abierto una tienda de ropa y ropa interior para niños en Viale Dante. La fecha de apertura no fue afortunada. «Lo inauguré en enero de 2020. En marzo estalló el covid. Las cosas no fueron bien: todavía tenía que pagar los gastos». Así que la tienda cerró en agosto de 2021. “No me podía quedar quieta, tengo tres hijos, de 11, 9 y 2 años, solo con el sueldo de mi marido, camionero, no podemos”. Iryna encuentra así un trabajo en una cooperativa, para trabajar en los turnos de noche de una empresa de embalaje. «Lo intenté, pero era difícil trabajar de noche y cuidar de la familia durante el día. No pude conciliar las dos cosas, tuve que irme, de mala gana».

En todo esto, mientras que en Piacenza tenemos que llegar a fin de mes, una parte de la familia en Kiev se enfrenta a situaciones mucho peores. “No es un buen momento en la capital. Mi padre y mis suegros viven allí. Muchas veces se quedan sin calefacción y sin luz, hay mucha confusión».

En resumen, se necesita un trabajo. Entonces Iryna decide seguir los pasos de su esposo. «Hacía 4-5 años que tenía carnet de camionero, pero luego nunca había tomado este camino, porque nació mi tercer hijo y me lancé al negocio como comerciante. “Me pregunto si algún día podré subirme a un camión”, decía siempre. Ahora, aquí estoy en un vehículo pesado. Trabaja en una conocida empresa de transporte en Piacenza. «Hice un periodo de coaching, dada mi inexperiencia -a pesar de que había viajado mucho con mi marido- y ya llevo un mes y medio viajando sola. Faltan los camioneros, los están buscando, es un trabajo muy solicitado».

Las reflexiones de Iryna son las de muchas mujeres que intentan llegar a fin de mes. “Así puedo pagar todos los gastos y también una niñera. La subida de precios nos ha pegado duro: la comida en el supermercado, el gasóleo, las facturas han subido. Realmente imposible con un solo salario lograrlo, especialmente criando a tres hijos. Tuve que trabajar duro". Entonces, los niños no querrán perderse nada. "Quieren hacer deporte, no queremos negarles esta posibilidad".

Entonces Iryna viaja en su camión. «Por ahora viajo por el norte de Italia, no viajo mucho: Novara, Milán, Bolonia... No soy la única mujer en mi compañía». Para 2023 espera que se resuelva la situación en su país de origen. Y en Italia «que la inflación se normalice. El costo de vida es demasiado alto".