La huelga de los camioneros de Agmaz Lukmaz es un ejemplo de determinación para luchar

La huelga de los camioneros  de Georgia, Uzbekistán y Tayikistán, pertenecientes a la empresa polaca Agmaz & Lukmaz, que llevan estacionados mas de un mes en un estacionamiento en Alemania, es un ejemplo de determinación para luchar y muestra el camino para conseguir objetivos.

Alrededor de 65 camioneros están en huelga en el área de servicio de la A5 en Gräfenhausen, en el sur de Hesse, desde el 20 de marzo. Exigen el pago total de sus salarios, que les han sido retenidos durante meses. Su huelga es un ejemplo de determinación para luchar, pero necesita una perspectiva independiente y el apoyo activo de los trabajadores en Alemania y en toda Europa.

Los camioneros vienen de Georgia, Uzbekistán y Tayikistán. Durante cinco semanas y media están en huelga contra la empresa de transporte polaca Łukasz Mazur, que opera las cadenas de transporte Agmaz, Lukmaz e Imperia. Transportan mercancías por toda Europa en nombre de grandes corporaciones como Volkswagen, Ikea, General Electric y DHL. Los conductores no solo exigen sus salarios pendientes, sino también un pago justo en general y condiciones de trabajo decentes.

Los camioneros habían dado a Mazur hasta el mediodía del pasado viernes para pagar los salarios adeudados. Pero los dejó pasar. A pedido de ZDF, el empresario polaco explicó a través de un video que había cumplido con sus obligaciones contractuales: no ganaría más dinero.

La mañana del Viernes Santo, Mazur había intentado sin éxito romper la huelga por la fuerza y ​​sacar los camiones del área de descanso con conductores de reemplazo. Cuando eso falló, accedió a transferir los pagos a conductores individuales, pero no en su totalidad y no para todos. Hasta el momento se dice que ha transferido un total de 200.000 euros para los camioneros del fuerte grupo de 65, pero aún faltan 97.858 euros.