Interceptados en Lugo dos camiones de la misma compañía con el tacógrafo manipulado

La Guardia Civil investiga a los conductores de dos vehículos pesados de la misma compañía que fueron descubiertos con el tacógrafo manipulado, lo que les permitía circular a una velocidad superior a la autorizada sin reflejarse dicho exceso y «engañando» al limitador de velocidad.

Así lo explicó este viernes el Instituto Armado, que detalló que en el marco de la investigación efectuada se investiga a tres personas, una de ellas el técnico del taller autorizado para la revisión y calibración de tacógrafos en donde se había efectuado la última revisión.

En concreto, la Benemérita detectó el pasado mes de octubre en un camión, tras un análisis inicial de la programación del tacógrafo que llevaba instalado, «indicios claros de que este pudiera estar manipulado».

Por ello, el grupo de investigación y análisis de tráfico (GIAT) efectuó pruebas dinámicas de velocidad, en las que comprobaron como «circulando a 90 km/h (velocidad máxima para este tipo de vehículos) el camión realmente circulaba a una velocidad de 99 km/h», explica la Benemérita.

El vehículo fue trasladado al centro técnico autorizado de tacógrafos, lugar en el que, tras efectuarse las pruebas pertinentes, se confirmaron las sospechas iniciales, de que «se había modificado la programación de tacógrafo al objeto de que este reflejase una distancia recorrida y una velocidad inferior a las reales (desfase entre los registros efectuados y los datos reales próximos al 10 %)», destaca la Guardia Civil.

El descubrimiento del citado camión con el tacógrafo manipulado, motivó que, tan solo dos días después, se efectuase la inspección de otro vehículo de la misma empresa, que presentaba inicialmente indicios del mismo tipo de manipulación.

En este caso y siendo localizado el vehículo un sábado, tuvo que ser inmovilizado junto al Centro Técnico Autorizado de Tacógrafos con el fon de poder ser sometido a inspección el primer día hábil posterior. 

El Instituto Armado resalta que el conductor de este segundo vehículo quebrantó la inmovilización ordenada, hecho que «supone la comisión de una infracción muy grave al Reglamento de Transportes, sancionado con 4.000 euros responsabilidad de la empresa de transportes» y, añade, que el conductor fuese investigado por un supuesto delito de desobediencia grave a agente de la autoridad, el cual pude conllevar penas de prisión de hasta tres años y multas hasta doce meses.

Presentado el vehículo para efectuar la revisión en el Centro Técnico Autorizado de Tacógrafos, al igual que con el primer vehículo detectado, se certificó que, matizan las mismas fuentes, «se había modificado la programación del tacógrafo al objeto de que este reflejase una distancia recorrida y una velocidad inferior a las reales».

Este modus operandi, sostiene la Benemérita, «afecta directamente a la seguridad vial debido al exceso de velocidad» con el que circulaban ambos vehículos, «consiguiendo la empresa efectuar los viajes más rápido, en un menor tiempo, lo que como se ha detallado afecta a la seguridad vial y a la ordenación del transporte», resalta.

La Guardia Civil recuerda que los vehículos destinados al transporte de mercancías y de viajeros, salvo excepciones, están provistos de un tacógrafo en el que se registran la velocidad y los tiempos de conducción y descanso de sus conductores, de la «importancia de respetar la velocidad y los tiempos de conducción y descanso establecidas» para estos conductores profesionales, lo que aumenta «la seguridad de todos los usuarios de la vía» y vela de este modo también «por sus propias condiciones laborales».