Antes de continuar, vale la pena recordar uno de los muchos casos, un conductor de camión que fue arrestado a principios de este año fue acusado de conducir bajo la influencia de drogas pesadas. Sin embargo, cuando fue detenido y allí se le realizaron pruebas periciales en presencia de un médico, el hallazgo del hombre fue negativo. A día de hoy, todo apunta a que el conductor quedará completamente absuelto de todos los cargos, aunque el caso sigue sin cerrarse a pesar del vencimiento de los tres meses y la pericia.
Y ahora volvamos al escándalo alemán. Como publicó hoy el diario berlinés "BZ", resultó que el problema descrito al principio se refiere a toda una serie de pruebas, producidas por la misma empresa, con un período de validez de septiembre de 2022. Por lo que, de no descubrirse las irregularidades, durante los próximos seis meses se harían acusaciones injustas de consumo de marihuana, anfetaminas o cocaína. Además, según los informes, el escándalo no es nuevo, ya que la primera información sobre pruebas defectuosas debía aparecer en diciembre del año pasado. Hoy, sin embargo, los dispositivos problemáticos están a punto de ser eliminados y es probable que sean reemplazados por pruebas de un tipo completamente diferente. En lugar de muestras de orina, se basarán en muestras de saliva, lo que es mucho más preciso.
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