Todos los que trabajan en el transporte de mercancías saben que la seguridad de la carga es importante. Pero debido a que es tan obvio, también es fácil de olvidar por un tiempo. Eso le pasó a un cliente y a un conductor polaco de 65 años, que tiene la suerte de poder contar un incidente en Emsbüren en Alemania.

La semana pasada, la policía alemana recibió un informe de un camión estacionado en un lugar peligroso en la A30 cerca de Emsbüren, no lejos de la frontera holandesa.

En el lugar, los agentes establecieron que en el tráiler se había colocado una carga mal asegurada. Esa carga consistía en 24 toneladas de piezas de hormigón para equipos de construcción. Debido a una fuerte maniobra de frenado, las piezas no solo habían atravesado la cabecera del semirremolque, sino también la pared trasera de la cabina del camión.

Milagrosamente, el conductor salió ileso y declaró en el acto que el remolque había sido cargado por el cliente. Se abren diligencias contra el conductor, que no debería haber iniciado el viaje en estas circunstancias, y el cargador.

El camión, que resultó gravemente dañado, tuvo que ser recuperado por una empresa especial. Debido a las medidas de recuperación, la carretera hacia Osnabrück tuvo que cerrarse por un lado durante unas cuatro horas.

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