La huelga de unos 50 camioneros llega al parlamento alemán

Con su huelga en una parada de descanso en Hesse, los camioneros  extranjeros quieren hacer cumplir los salarios pendientes. También se trata de prestar atención a las condiciones que violan la legislación laboral alemana.

Durante el fin de semana de Pascua, en el área de servicio de Gräfenhausen en la A5 en el sur de Hesse, se prolongó una huelga de camioneros de Europa del Este y Asia Central, que exigen los salarios pendientes de su empleador polaco. Alrededor de 50 camioneros han estado en huelga en el lugar desde finales de marzo . Cuentan con el apoyo de la Red Asesora de Movilidad Justa y de sindicalistas alemanes. En el conflicto, el transportista polaco aparentemente también usó la intimidación.

Los conductores que pasaban mostraron su solidaridad con los camioneros, la mayoría de los cuales procedían de Georgia y Uzbekistán. Un reportero de alemán observó cómo una familia entregaba a los conductores  alimentos y conducían saludando. También hubo pan de Pascua. "El ambiente es bueno. Estamos muy contentos por tanto apoyo", dijo uno de los conductores. "Hemos trabajado honestamente, y queremos seguir haciéndolo, por salarios justos".

"Lo que sucede aquí en Gräfenhausen puede suceder en cualquier lugar, y a menudo no lo vemos", dijo el ministro de Trabajo de Renania-Palatinado, Alexander Schweitzer (SPD), durante una visita el domingo. Una cosa es buena acerca de la huelga: " Alemania finalmente está echando un vistazo y viendo lo que está sucediendo en las calles alemanas". Quería utilizar la huelga como una oportunidad para volver a poner las condiciones laborales en el transporte internacional de mercancías en la agenda de la conferencia de ministros de trabajo y asuntos sociales.

No estaba muy tranquilo el viernes cuando el propietario de la empresa de camiones polaca llegó con una empresa de seguridad y un equipo de cámara e intentó apoderarse de sus camiones. La policía evitó un enfrentamiento violento con los guardias de seguridad vestidos marcialmente. Hubo casi 20 arrestos.

El trasportista y los guardias de seguridad ahora están libres nuevamente. Están acusados ​​en diversos grados de alteración grave del orden público, coacción, amenazas, tentativa de lesiones corporales peligrosas e interrupción de una reunión.

No debería haber más incidentes: "La policía está permanentemente en el lugar y patrulla", dijo un representante del sindicato Verdi de la Agencia de Prensa Alemana. Llegó con una manguera y combustible, ya que varios conductores se estaban quedando sin diésel y ya no podían hacer funcionar la calefacción auxiliar por la noche. Se están congelando en sus camarotes.

También hubo estímulo para los conductores, por ejemplo, del SPD en el parlamento del estado de Hesse. El líder del grupo, Günther Rudolph, dijo el domingo: "Lo que sucedió el viernes no puede ser tolerado por un estado constitucional".

Según el anuncio del domingo, los miembros de los Verdes en el parlamento estatal de Hesse, Martina Feldmayer y Torsten Leveringhaus, se hicieron una idea de la situación y expresaron su solidaridad. "El hecho de que una supuesta agencia de detectives viniera de Polonia y amenazara a los camioneros, que valientemente hicieron campaña por sus salarios justos, y quisieran tomar medidas violentas contra ellos, es un incidente increíble", explicaron. También fue gracias a la rápida reacción de la policía que la situación no escaló.

También hubo reacciones a nivel federal. "El incidente en Gräfenhausen destaca las condiciones catastróficas en partes de la industria del transporte", dijo el presidente del Comité de Transporte del Bundestag, Udo Schiefner (SPD), a la red editorial Alemania (RND / Monday). Desafortunadamente, conocidas empresas alemanas también contrataron transportistas a precios de dumping y cerraron los ojos ante el hecho de que "este tipo de ofertas no serían posibles con un pago justo y el cumplimiento de todas las reglas". Schiefner anunció una moción de las facciones de la coalición en el Bundestag, en la que se le pediría al gobierno federal que haga más para combatir las condiciones laborales injustas y las distorsiones de la competencia.

Mientras tanto, la petición de los conductores a los clientes de la empresa de transporte polaca está empezando a tener cierto éxito, dijo Edwin Atema, del Sindicato Europeo de Trabajadores del Transporte, quien ha sido designado mediador por los huelguistas. “Las primeras empresas han dicho que dejaron de trabajar juntas cuando se enteraron de las condiciones laborales”. Si bien este es un primer éxito, Atema dijo que espera que las compañías ahora usen su influencia para hacer cumplir el pago del conductor. Según él, se espera que dos representantes de la Confederación de Sindicatos de Georgia lleguen al área de servicio el martes y el miércoles.

El intento de intimidar a los conductores no fue el primero. "También hubo protestas de pequeños grupos de conductores en otras áreas de descanso en Alemania, por ejemplo en Garbsen, cerca de Hannover", dijo Atema. Después de ser intimidados, abandonaron las áreas de descanso y algunos llegaron a Gräfenhausen para continuar. Otros procedían de una huelga en Italia. "La policía no hizo nada contra los matones allí, a diferencia de aquí".